Friday, October 9, 2020

El resurgir de la esvástica (Autor: Dino Alreich) Capítulo 7

 

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Capítulo 7


La marca

 


Christopher permaneció largo rato apoyado sobre aquel poste con sus ojos cerrados pretendiendo hacerse creer que lo que le estaba aconteciendo era solo una terrible pesadilla de las que venían sobre él como ráfagas de la noche, sin embargo, la escena parecía no tener fin. Parado frente a un escaparate, Christopher podía notar que en los televisores los noticieros no cesaban de argumentar que aquellas misteriosas desapariciones se debían a extraños raptos de objetos voladores no identificados. Se comenzó a regar la noticia que aquello se trataba de una limpieza planetaria necesaria para el establecimiento de un nuevo orden mundial. Se oía la noticia del mensaje del presidente de los Estados Unidos:

“Señores de todos los pueblos, hoy me dirijo a ustedes como un intermediario entre los hombres y nuestros guías espirituales. Estos seres nos han dado la capacidad de ser “walkins” y mensajeros de los maestros del cosmos. Estos grandes maestros del cosmos nos están llevando a una nueva era. Una nueva era de paz, prosperidad y hermandad en toda la tierra. Esa nueva era ha comenzado hoy. El planeta ha limpiado los aires de todas aquellas corrientes negativas que estorban el establecimiento de un Nuevo Orden Mundial. No hay porque alarmarse, estas personas que han desaparecido de forma misteriosa eran considerados por los maestros espirituales como una amenaza para la armonía global. Entendemos el dolor que puede surgir para algunos en su ausencia, pero es una acción que la misma madre tierra ha considerado necesaria. Hemos entrado en la era de Acuario, una era llena de prosperidad económica y grandes beneficios para la humanidad. Los sabios maestros espirituales nos han conducido al establecimiento de una marca mundial que será la herramienta contra las injusticias, la pobreza, el hambre, la miseria, la marginación, los robos y la escasez. Por medio de este sistema innovador llevaremos a las naciones a la prosperidad mundial justa y equitativa…” –se oía la voz del presidente.

Inmediatamente luego de escuchar esta noticia Christopher pensó en Heda. Quiso llamarla y marcó su número en el celular. El teléfono de Heda sonó varias veces, pero nadie respondió.

–¡Vamos, responde! –dijo Christopher marcando nuevamente el teléfono bastante desesperado.

Al nadie contestar el teléfono, Christopher se dirigió a su apartamento. Al caminar iba reflexionando y tratando de entender la realidad. Le costaba trabajo entender que el presidente de los Estados Unidos afirmara que había una clase de conexión del gobierno y seres de otros planetas y para colmo afirmaba que estos maestros espirituales venían a establecer un gobierno mundial en la tierra con su ayuda.  Todo aquello le parecía pura locura.

Christopher avanzó lo más que pudo a su apartamento. Para llegar tuvo que tomar unas rutas no acostumbradas ya que las calles se comenzaban a llenar de soldados militares. El ambiente se parecía al de un golpe de estado. Allí en su apartamento procuró cerrar todas las puertas con la mayor seguridad posible. Era el momento cuando comenzaba a sentir temor de lo que pasaba en la sociedad. La presencia militar era muy notable y se comenzaba a sentir una presión social nunca conocida. Sin embargo, la vida en la ciudad debía continuar, aunque fueran rodeados de soldados o militares.

En la universidad, Christopher trataba de evitar todas las preguntas que los estudiantes le hacían al respecto y buscaba concentrarse en las cosas que antes enseñaba. Tan pronto terminaba su horario de clases buscaba la forma de desligarse de todos alrededor y volver a su solitario apartamento.

Encerrado en las cuatro paredes seguía leyendo los enigmáticos libros del fenecido Mathew. Sus ojos quedaron fijos sobre un pasaje del libro de Apocalipsis. Se trataba de los versos nueve y diez del capítulo catorce de ese libro:

“…si alguno adora a la bestia y a su imagen, y recibe la marca en su frente o en su mano, él también beberá del vino de la ira de Dios, que ha sido vaciado puro en el cáliz de su ira, y será atormentado con fuego y azufre delante de los santos ángeles y del Cordero; y el humo de su tormento sube por los siglos de los siglos…”

Christopher cerró el libro de forma abrupta. No quería asociar aquellas letras que acababa de leer con las acciones del gobierno que buscaba a toda cosa colocar los implantes compulsorios sobre toda la gente. Se dispuso a salir al parque y distraerse la mente, pero al llegar allí se dio cuenta que las cosas habían cambiado.

El gobierno estaba tratando por todos los medios de sellar a la gente con un novedoso sistema de seguridad nacional. Se trataba del comentado microchip. Las economías del mundo cayeron repentinamente como parte de un programa bien planeado por los grupos poderosos. Ahora, la propaganda mundial se enfocaba en la marca. Las naciones comenzaron a verla y aclamarla como a un dios cuando con su código de barras implantado en los humanos vino a resolver todos los problemas de comercio, delincuencia, tráfico de drogas, robos, y demás problemas sociales.  Abarcó todas las transacciones económicas y comerciales del mundo. En el sistema que el proclamado líder mundial propuso, eliminó el dinero y la necesidad de imprimir papel moneda. Fue un gran adelanto cuando se resolvieron las irresponsabilidades, injusticias e ilegalidades de las especulaciones bancarias de las bolsas internacionales. Les comenzó a garantizar un control absoluto de las riquezas o por lo menos haciéndole creer a la humanidad que eran ricos, aunque fuera de forma pasajera. Les propuso facilitar las transacciones comerciales, eliminar la diversidad de monedas internacionales en todo el mundo. Buscaba acabar con el crimen organizado y eliminó el dinero circulante lo que ocasionó el cese del tráfico de drogas al no haber monedas. Como consecuencia logró la eliminación de los asaltos y robos. Lo que la gente desconocía era que aquel sistema de marca de código de barras fue un plan muy bien detallado de antemano por las sociedades secretas que dominaban la tierra. Casi la totalidad de la inestabilidad económico mundial se debía a las guerras y monopolios que las elites poderosas habían creado de manera intencional. Ahora, su nuevo monopolio se relacionaba a aquella marca con la cual pretendían someter la tierra. Estas elites dominaban, financiaban y controlaban la tecnología y usaron la nanotecnología y ciencia ultrasecreta para crear la marca. Hicieron sellar a casi todos en el índice de la mano derecha o en la frente de cada individuo. Algunos llamaban a la marca el “ángel guardián”. Dicho artefacto era más diminuto que un punto de maquinilla e incluía todas las informaciones sociales del hombre, así como nombre, número de identidad nacional, posición, recursos económicos, estado de salud, entre otras cosas. Todo al alcance de leer por cualquier scanner que tuvieran bancos, hospitales, policía y toda agencia o negocio bajo el control del estado que se comunicaba con la computadora central denominada “la bestia.

Lo que muchos ignoraban era que esta tecnología era totalmente vulnerable a caer en manos de terroristas y dictadores.

El gobierno pretendía adueñarse de la privacidad de las personas por medio de la tecnología y eso lo ocasionaba completo desagrado. Todos aquellos cambios provocaban toda clase de reacciones. Todos buscaban entender el significado de todas aquellas cosas que estaban sucediendo en la sociedad.

Christopher vivía en Manhattan, pero notaba que en barrios vecinos no cesaba la confusión de igual manera. Wall Street, Harlem, Bronx, Long Island, Brooklyn eran solo algunos de los testigos de lo que estaba ocurriendo a nivel mundial.

Christopher subió las escaleras de su viejo apartamento casi corriendo, procurando evitar la muchedumbre inquisidora de todo lo que acontecía.  Abrió la puerta con la llave que traía en su chaqueta y colocó un letrero en el cristal de esta que decía: “Please, do not disturb!” y cerrándola se dirigió al pasillo interno. Al entrar pudo notar que Mangual había regado su comida por el piso del apartamento.

–Pero Mangual, ¿qué has hecho? dijo Christopher buscando la manera de recoger el pequeño desastre.

Mangual brincó del maltratado sofá a recibir a su dueño procurando rozarle los pies con su pelaje como de costumbre.

–Mangual, ¡vamos, aléjate! –dijo Christopher de mal humor procurando zapatearse de su amigo que le estorbaba el paso.

Christopher estaba muy preocupado por lo que estaba sucediendo fuera de la casa y ahora todo le causaba estrés y malestar.

–¡Ey! ¡Deja eso! –dijo Christopher arrancándole el control remoto de las patas a Mangual que estaba entretenido jugando en su sofá favorito.

Christopher tomó el control y lo puso en su canal acostumbrado de noticias y sentándose procuraba calmarse. Al encender el televisor notó que había sinnúmero de personas pretendiendo dar explicaciones a lo que estaba aconteciendo en la sociedad. La periodista del canal de noticias estaba entrevistando a uno de los líderes de la religión raeliana cósmica que aseguraba desde su punto de vista una explicación para el acontecer social de aquel momento.

–¿Cómo ustedes explican este suceso de la desaparición de millares de gente en todo el mundo? –preguntó la periodista a Claude Vorilhon, uno de los dirigentes de la secta.

–Nuestro movimiento es una organización religiosa mundial que creemos en la existencia de seres de otros planetas similares al nuestro, pero más avanzados científicamente conocidos como “los Elohim”. –contestó Claude.

–Pero ¿Elohim no es el Dios del Antiguo Testamento y de la Biblia? –interrumpió la periodista.

–Lo que sucede es que han sido los extraterrestres los que han puesto y creado a los líderes y religiones de toda la tierra para llevar este mundo a la paz mundial. Estos son los verdaderos Elohim. –aseguró Vorilhon.

–¿O sea que ustedes proponen que todos los líderes religiosos fueron puestos en la tierra por seres de otros planetas? –preguntó la periodista con mirada de asombro.

–Estamos hablando de seres con una tecnología a años luz de la nuestra. Estos seres excepcionales fueron los verdaderos creadores de la tierra y sus habitantes por medio de la ingeniería genética y la manipulación del ADN. Fueron ellos los que enviaron a los líderes principales de todas las religiones. Su meta era darnos un mundo ideal. –explicó Vorilhon.

–¿Entonces ustedes responsabilizan a los extraterrestres de nuestra propia existencia? ¿Dónde queda Dios? –preguntó la periodista.

–Ya le contesté la pregunta. Los extraterrestres son los dioses. Y no solo eso, son ellos los que únicamente pueden por medio de la clonación y la transferencia mental que surge de ellos lo que nos dará inmortalidad. –dijo Vorilhon con palabras de convencimiento.

–Entonces, ¿cómo ustedes reaccionan ante las aseveraciones de los desaparecidos cristianos que afirmaban que esos contactos que ustedes tienen o esos encuentros místicos con esos seres son encuentros con seres demoníacos? –preguntó la periodista.

–¡Imposible! Los fines de estos seres no son malos. –contestó Vorilhon.

–¿Cuál es el fin social de su religión raeliana cósmica? –interumpió la periodista.

–Traer una nueva era de bonanza, paz, libertad sexual, armonía, valores, derechos y libertades. –contestó Vorilhon.

–Por último, ¿qué harán para conseguirlo? –preguntó la periodista.

–Ya lo hemos conseguido. Proclamaremos el mensaje de Rahel a todas las naciones. ¡La Nueva Era ya está entre nosotros! –contestó Vorilhon.

–¿Quién es Rahel? –indagó la periodista.

–Rahel es el alienígena que nos reveló la verdad en Francia. –contestó Vorilhon.

–¿Qué explicación les da Rahel sobre el millar de gente que han desaparecido de forma extraña de la sociedad? –preguntó la periodista.

–Mira, la tierra está en un momento de transición. Hemos pasado de la era de Piscis a la era de Acuario. Es ahora en esta nueva era que se logrará la paz mundial. El planeta mismo tuvo que vaciarse de gente que no estaban en armonía con la paz mundial. –explicó Vorilhon.

–O sea que esas personas desaparecidas que al parecer eran cristianos, según dicen las investigaciones ustedes los catalogaban como obstáculos para la paz mundial. –comentó la periodista pensativa–. Pero ¿acaso el cristianismo verdadero, lejos de las añadiduras de los religiosos no promovía la paz mundial? –indagó.

–El cristianismo que promueven los raelianos cósmicos es el del ecumenismo y amor entre todas las religiones que conducen a la salvación por diferentes filosofías e ideas. El cristianismo que el planeta rechazó y que desaparecieron de la faz de la tierra fueron aquellos fanáticos que creían en la exclusividad de Jesucristo para alcanzar la salvación.  –dijo Vorilhon.

–¿Y a dónde fueron los desaparecidos? –preguntó la periodista.

–El planeta los eliminó, ya no existen. –contestó Vorilhon.

–¿Y qué sucederá de ahora en adelante? –preguntó la reportera.

–Este es el momento cuando la humanidad tiene que interesarse en el contacto con estos maestros y guías que vienen de otras galaxias. De esta manera recibiremos inmortalidad y paz sobre la tierra y tendremos un gobierno central y mundial el cual será regido por la geniocracia. Este gobierno acaba de comenzar en breve. El líder mundial ya arribó al poder. –explicó Vorilhon.

–¿Qué es la geniocracia? –preguntó la periodista.

–Es una oligarquía donde el poder mundial es entregado al grupo de nuestros líderes genios y con un coeficiente intelectual superior. Sólo ellos tienen la capacidad para dirigirnos a lo que nos conviene. –dijo Vorilhon.

–¿Qué se lograría con eso? –preguntó la periodista.

–Crearíamos una embajada para que estos seres especiales nos transmitan a toda la raza humana de sus grandes conocimientos y tecnología. Sólo de esta forma lograremos la paz mundial anhelada. Todos deben conocer que la raza extraterrestre es real y que apoyamos al líder mundial que ha venido a reinar. ¡Él es el Mesías esperado por todos! La humanidad tiene que obedecerle y acatar sus dictámenes. –contestó Claudio.

–¿Y qué me dice de los libros que dejaron los cristianos desaparecidos y que aseguraban que ese nuevo orden mundial del que tanto se habla no es otra cosa sino el reinado del anticristo? Según ellos, el gobierno centralizado mundial de Europa que regirá las naciones es parte de una conspiración de demonios utilizando a los iluminados satanistas y que promovido por los jesuitas dominaría sobre la masonería y sociedades secretas para someter todos los gobiernos y conducirlos de miles maneras al dominio anticristiano. –dijo la periodista.

–¡Por favor! –dijo Vorilhon riéndose lleno de incredulidad. – ¿Cómo puede alguien sugerir que un gobierno de paz mundial proviene de los demonios?

–¿Y qué me dice del polémico símbolo que identifica vuestra secta? Ustedes usan tanto la estrella de David que usa la masonería, así como la svástica usada por los ocultistas, Hitler, nazis, y budistas. ¿No puede esto provocar el pánico en sectores que identifican esos símbolos con las atrocidades hechas por el Tercer Reich de Hitler? ¿Son dignas de confianza vuestras intenciones y no caer en una nueva Shoah mundial? inquirió la periodista.

–No en lo absoluto. Nada que ver. Como le dije antes. Creemos que todas las religiones e ideologías de predominio social tienen un mismo origen común. Pero todas tienen un buen fin de paz mundial. Los símbolos varían, pero tienen un mismo propósito, por ejemplo, para nosotros la svástica no representa muerte de los judíos ni de ninguna raza, sino que representa la infinidad del tiempo y tiene orígenes sánscritos y budistas de incumbencia mundial. Dependiendo de las regiones varían en significado, pero no se resume a un mismo significado general o mundial. –aseveró Vorilhon.

–¿O sea que los judíos no tienen nada que temer con una oligarquía como la propuesta por ustedes? –preguntó de forma jocosa la periodista.

–¡Claro que no! –contestó Claudio con voz fuerte. –Por lo contrario, queremos ayudar en las negociaciones con Israel y queremos que se continúe con la preparación del tercer templo de Israel ya que será en el que recibiremos a los Elohim. Ellos se han acercado a nosotros por medio del líder mundial. –dijo Vorilhon.

–Entonces, ¿piensan ustedes que su líder será el Mesías esperado por los judíos desde hace mucho tiempo? –dijo la periodista.

–¡Exactamente! Él es quien llevará el mundo a la paz. –contestó Vorilhon.

–Entonces, ustedes, así como los judíos rechazan que el Jesucristo del cristianismo fuera el Mesías de Israel. –dedujo la periodista.

–Jesucristo era un mero profeta más del mismo nivel que Moisés, Buda, Confucio, entre otros. Todos tuvieron su propósito de parte de nuestros maestros guías. Pero ninguno de ellos era Dios. –dijo Vorilhon.

–Cambiando de tema... se ha vinculado la religión raeliana cósmica con la clonación y la nanotecnología. ¿Qué tienen que decir al respecto? –preguntó la periodista.

–Creemos que la inmortalidad la alcanzaremos los humanos por medio la ciencia que proviene de los seres de luz. Estos seres nos guiarán a alcanzarla sea por medio de la nanotecnología o la revelación. –aseveró Vorilhon.

–Pero ¿de qué manera? –indagó la periodista.

–La inmortalidad se puede obtener por medio de técnicas de clonación de seres perfectos. Estos seres perfectos ya están entre nosotros. Por medio del copiar de esa genética podremos hacer que el ser humano crezca y madure de forma más rápida. Sus células no estarán sujetas al envejecimiento, sino que con la ayuda de la nanotecnología serán auto-restauradas. La memoria y la personalidad de la gente irán de acuerdo con un ordenador o computadora central que es el ideal de los genios. De esta manera y por medio de la tecnología se logrará transferir pensamientos y emociones a un chip que será portado por las personas. Ese chip será capaz de transmitirlo a la mente y nervios de la gente. En otras palabras, tendremos un mundo de genios. –aseguró Vorilhon.

–¿Y qué de los peligros? ¿Qué tal si una computadora central como esta cae en manos de las personas equivocadas? ¿No sucedería todo lo contrario si esta tecnología cayera en manos de villanos o gente sin escrúpulos?  –preguntó la periodista.

–Eso no sucederá. Los maestros guías se encargarán de que esa tecnología sea usada responsablemente y conduzcan el mundo a la paz mundial. En vez de preocuparnos por estos avances, lo que tenemos que hacer es estar seguros de que el terrorismo desaparecerá, así como las acciones negativas de la gente. Todo será regido por el bien de una nueva era para todos. –dijo Vorilhon.

–Pero a estos “microchips” producto de la nanotecnología de la que usted habla, ¿no se le puede llamar manipulación mental? –indagó la reportera.

–De lo que estamos hablando es de transferencia mental. Transferiremos información no acciones. De esta manera ayudaremos a la humanidad a desarrollar sus cualidades de pasividad, armonía, paz, amistad, y cosas positivas. Esto, señores, se obtiene por medio de la transferencia de parte de los seres de luz sea por contacto directo como por medio de la tecnología que ellos mismos nos inspiran. Para lograrlo la raza humana completa tiene que ponerse a la disposición de los creadores Elohim y su profeta. Cada ser humano que recibe esta transferencia se convierte en un ángel protector de nuestro líder supremo. Son los extraterrestres los que tienen los códigos genéticos que poseían los grandes hombres como: Jesús, Buda, Hitler y demás, y son ellos los que sólo pueden transferirlos a nosotros para salvarnos. –explicaba Vorilhon.

–Esto de la manipulación genética, ¿no se les parece esto a los mismos objetivos de las granjas Lebensborn de Hitler y su gente de querer buscar la creación de una élite y el superhombre que pueda surgir de ellos? –indagó la periodista.

–Mira, sin duda alguna Hitler fue uno de los grandes hombres de la historia. Quizás malentendido por muchos. Él buscaba ese gobierno perfecto. –explicaba Vorilhon.

–Entonces, ¿son las metas de ustedes las mismas que la de los hitlerianos? –preguntó la periodista.

–No exactamente, pero compartimos algunos principios al igual que de todas las religiones o líderes poderosos de la tierra. –explicaba Vorilhon.

–Sin duda alguna que la secta raeliana cósmica concuerda en casi toda su filosofía con los ideales de la Nueva Era. Por ejemplo, es cierto que ustedes proponen: abolir todos los gobiernos establecidos, abolir la dictadura en favor de la dictadura, abolir todas las religiones, establecer un gobierno mundial único o una dictadura utópica benévola, sincretismo religioso afirmando que toda religión es lo mismo, una economía mundial única, la eliminación del dinero para dar paso a una economía sin papel, búsqueda de paz universal, etc. –aseveró la periodista.

–En eso estás muy bien informada. Mira, como dije antes, todas esas filosofías se resumen en los mismos intereses de bien común impuestos en los ideales y filosofías de parte de nuestros creadores. Ese reino ya está entre nosotros. –dijo Vorilhon.

El televisor seguía encendido mientras que Christopher yacía en su sofá que, aunque viejo y maltratado le servía de relajación y calma de las faenas de los estudios. Tal parecía que Christopher iba y venia de la realidad y se encontraba inmerso en un mundo de sueños que hacían que su tiempo y espacio se confundiera con esas revelaciones.

Pasaron varias horas cuando Christopher se levantó sobresaltado a causa de un ruido en la cocina. Sonó como un duro golpe de metal resonante. Al mirar notó que Mangual se había trepado a la mesa buscando algo de comer.

–Oye, oye, eres un barril sin fondo… ¿no te parece poco el desastre que has hecho? –dijo Christopher con cariño a su mascota y proponiéndose servirle algo de comer en su pequeño plato que descansaba junto a una puerta trasera.

Christopher se dispuso a darse un baño y luego retornó al viejo sofá para leer su revista favorita de autos y mecánica. Mangual estaba medio dormido debajo de los muebles luego de comer sin frenos. Christopher tomó su revista luego de ir a la nevera y tomar una lata de refresco que llevaba a su sofá. Allí en el sofá leyó la portada de la revista que decía: “Cuando los ovnis lleguen”. Presentaba la ilustración de una nave espacial siendo aterrizada en el patio de la casa blanca de Estados Unidos. La revista denominada Mecánica Popular condicionaba las mentes de sus lectores a aceptar como cosa común la existencia de seres y naves de otros planetas.

Pero ¿qué hacía una revista de automóviles promoviendo temas de OVNI? Pareciera ser que el tema iba mucho más allá de filmes de ficción como se promocionaban en muchos de los filmes modernos. La idea de las conexiones de los gobiernos con estos seres y bases secretas se presentaba en diversidad de películas que resonaban de forma cómica en las mentes de todos. Sin embargo, ahora eran muchos los que ya daban por sentado que más allá de los planetas vacíos que conocía en la galaxia existen otras galaxias y sistemas que poseían seres semejantes a los humanos, pero más avanzados. Graciosamente siempre colocando al hombre en desventaja intelectual frente a toda posibilidad de vida.

Christopher Borazzo respondiendo a su curiosidad comenzó a investigar este fenómeno para pretender llegar a alguna conclusión. Por un lado, estaban las extrañas manifestaciones masivas de luces y aparatos en los cielos siendo vistas y testimoniadas por casi todos en este tiempo. Por otro lado, la innegable realidad de los millares de personas que acababan de desaparecer. Unos afirmando que Jesucristo vino y se llevó a su pueblo consagrado y otros afirmando que el planeta limpió la “corriente negativa” que entorpecía la paz de un reino mundial que se aproximaba. En su investigación Borrazo encontró que existían indicios de semejantes apariciones en las más arcaicas civilizaciones. Existían huellas de un patrón similar de extraños seres que aparentaban venir de afuera. Ahora le faltaba encontrar su identidad, ¿realmente eran lo que decían los medios de la prensa? ¿Realmente eran seres guías espirituales o de gran inteligencia para ayudar al hombre o alguna otra clase de seres? Más que nunca el tema de los ovnis comenzó a tomar auge y los gobiernos eran los promotores de dichos encuentros cercanos. Fue el momento cuando los ojos de todo el mundo fueron puestos en el nuevo líder mundial que las naciones habían entronado sobre ellos.

 

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